Ensalada de garbanzos mediterránea

Receta ↓ Ángela Solar

¡Descubre el sabor del Mediterráneo con esta ensalada de garbanzos! Imagina una combinación de ingredientes frescos y llenos de color que no solo deleitarán tu paladar, sino que también aportarán una dosis extra de nutrición a tu dieta. Esta ensalada de garbanzos mediterránea es sencillamente irresistible y, lo mejor de todo, ¡es muy fácil de preparar!

Ya sea para disfrutar en un día soleado o como un toque fresco en tu menú semanal, esta ensalada es la elección perfecta. Y para continuar explorando los sabores del Mediterráneo, te invito a probar una dulce tarta de chocolate, una colorida paella de verduras o refrescarte con una ligera ensalada de lentejas.

Para que esta ensalada mediterránea sea un éxito, aquí tienes los ingredientes imprescindibles en tu cocina.

• Tienes dos opciones: los secos que puedes dejar en remojo y cocer con mimo, o los ya cocidos en conserva para esos días a contrarreloj. Personalmente, opto por la primera opción siempre que puedo, ¡la diferencia es notable!
• Verduras frescas - Pimientos crujientes, tomates jugosos y cebolla roja, todos ellos picados finamente para una explosión de frescura en cada bocado.
• Aceite de oliva virgen extra, el alma mediterránea, es imprescindible para dar ese toque dorado y delicioso.
• Queso feta - Desmigado, aporta una textura cremosa y un sabor salado que contrasta de maravilla con el resto de ingredientes.
• Aliño - Una emulsión de aceite de oliva, zumo de limón fresco, ajo picado y hierbas como orégano y albahaca transformarán tu obra maestra.
• Sazón - No subestimes su poder; es el toque final que realza todos los sabores.

Preparación de la ensalada de garbanzos mediterránea

¡Empecemos! Yo siempre digo que la preparación de una receta es tan importante como el resultado final. Así que, sigue estos sencillos pasos para disfrutar de una deliciosa ensalada de garbanzos mediterránea.

1. Comienza por cocer los garbanzos si has decidido utilizar los secos. Personalmente, prefiero cocinarlos yo misma, ya que creo que el sabor es mucho más intenso y natural. Si no tienes tiempo, ¡no te preocupes! En conserva también dan buenos resultados.

   

2. Mientras se cuecen, aprovecha para preparar el aderezo. En un recipiente pequeño, mezcla el aceite de oliva virgen extra, el zumo de limón, el ajo picado, el orégano y la albahaca. Este aliño le dará un toque mediterráneo irresistible a tu plato.

3. A continuación, en un bol grande, combina los garbanzos cocidos (o escurridos, si los has utilizado en conserva), el pimiento rojo, los tomates, la cebolla roja y el queso feta. ¡Ya casi lo tienes!

Un consejo: antes de verter el aderezo sobre la ensalada, prueba y ajusta los condimentos a tu gusto. De esta forma, podrás conseguir el equilibrio perfecto de sabores.